Toda la información que debes saber sobre las fracturas de cadera

Las fracturas de cadera son una de las lesiones más graves que puede sufrir el ser humano, sobre todo si son adultos mayores. Luego de los 65 años en los hombres y los 50 años en la mujer las posibilidades de sufrir alguna enfermedad de los huesos u osteoporótica es mayor.

¿Qué factores influyen en las fracturas de cadera?

Los 2 factores más importantes que influyen sobre este tipo de fracturas son falta de movilidad en las personas mayores y la osteoporosis. Mientras menor sea la movilidad, mayor será el riesgo de sufrir algún tipo de fractura, debido a que el cuerpo perderá agilidad y por tanto será más torpe e inestable.

¿Qué es la osteoporosis?

La osteoporosis es una enfermedad que afecta a los huesos del esqueleto humano que conlleva la disminución y el déficit de la densidad de la totalidad de la masa ósea. Por esta razón, los huesos tienden a volverse más esponjosos y huecos, dando como consecuencia su fragilidad, por lo que son se vuelven muy pocos resistentes a los golpes y se pueden romper con mucha facilidad.

Tipos de fracturas de cadera

Para que sea de más fácil comprensión te explicaremos los tipos de fracturas de cadera que existen a partir de cada área de esta, es decir: El área 1, el área 2 y el área 3.

Área 1

En esta zona se pueden presentar fracturas subcapitales, cervicales o del cuello femoral y basicervicales o de la base del cuello femoral.

  • Fracturas subcapitales: Se producen debajo de la cabeza femoral.
  • Fracturas cervicales o del cuello femoral: Son producidas en el cuello del fémur.
  • Fracturas basicervicales o de la base del cuello femoral: Se localiza en la unión entre la región trocactérica y el cuello femoral.

Área 2

Esta zona está constituida por las fracturas trocatéricas o pertrocantéricas, las cuales se caracterizan por ser producidas en una parte media de la cadera.

Área 3

Al igual que el área 2, solo tiene un tipo de fractura y la subtocantéricas, caracterizada por estar localizada por debajo de la zona trocantética.

Complicaciones de las fracturas de cadera

Coagulación de la sangre

Puede que luego de la cirugía haya una posibilidad de que se forme una coagulación en las venas de las piernas. Esto puede ser inseguro, debido a que una sección del coágulo puede desprenderse y moverse hacia el pulmón, el corazón o, ocasionalmente, el cerebro. Este problema se tratará a partir del principio con medicación anticoagulante.

Nueva fractura

A lo largo de la cirugía, piezas sanas de la articulación de la cadera podrían fracturarse. Algunas veces las fracturas son lo suficientemente pequeñas como para curarse por sí solas, empero las fracturas mayores podrían necesitar ser estabilizadas con alambres, tornillos y, probablemente, una placa metálica o injertos de hueso.

Lesiones en los nervios

En pocas situaciones, los nervios en la zona donde se sitúa el implante pueden tener posibilidades de lesionarse. El mal en los nervios puede provocar entumecimiento, agotamiento y dolor siendo heridas de resolución lenta y compleja.

Tienen la ocasión de surgir complicaciones tras la cirugía, sin embargo, el caso más recurrente va a ser que la cirugía tras una fractura de cadera evolucione de manera correcta y posibilite que el paciente se pueda mover en los primeros días después de la cirugía.

Infecciones

Se pueden producir infecciones en el lugar de la incisión y en los tejidos más profundos próximos a la nueva cadera. La mayor parte de las infecciones se tratan con antibióticos. Sin embargo, una infección grave cercana a la prótesis podría solicitar cirugía para retirar y suplir la prótesis.

Aumento de la longitud de la pierna 

A veces, una totalmente nueva cadera puede ocasionar que una pierna sea más extensa o corta que la otra. Lo cual puede elaborar una contractura de los músculos que rodean la cadera. En esta situación, robustecer y estirar aquellos músculos de manera progresiva podría ser de ayuda.

Aflojamiento

Esta complicación se da en pocos casos en los implantes nuevos, la nueva articulación podría no fijarse de manera sólida al hueso o podría aflojarse con el paso del tiempo, ocasionando dolor en la cadera. Podría ser elemental una cirugía para resolver este problema.

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