El mundo empresarial puede resultar tan prominente económicamente como complejo, con cada vez mayor nivel de competitividad y generando consecuentemente estrategias para desplazar a los demás contendientes y hacerse con un lugar de respeto y prestigio dentro de la industria, lo cual es una tarea difícil en un sector donde todos quieren destacar y sobresalir sobre el resto.
Las nuevas maneras de hacer negocios y llevar a cabo emprendimientos han tenido un alza significativa, entre otras cosas apoyados por el efecto de la tecnología, modernizando la rama en todos los aspectos, imprimiéndole una nueva cara al mercado, y con ello a todos los interesados en formar parte de él, con propuestas totalmente innovadoras, subiendo al siguiente nivel en cuanto a evolución y desarrollo.
Y es que con la popularización del internet y todo el revuelo que esto provocó en su momento, la era digital y electrónica se instaló obligando a las empresas a adaptarse a las nuevas tecnologías o sucumbir en el intento de negarse a aplicarlas, sin embargo, el tiempo les ha dado la razón, focalizando su atención y servicios en aras de promover un crecimiento que permita el progreso y la viabilidad de todas las comunidades sin importar sus orígenes o características sociales.
Por lo mismo, es normal que en la actualidad las innovaciones ocurran de forma más apresuradas y súbitas, cuando anteriormente todo dependía de un proceso más paulatino, del igual modo, el mercado ha incorporado nuevas maneras de negociar e invertir el capital, ya sea mediante las distintas opciones de apoyar proyectos nacientes o a través de las innovaciones que presenta el actual mercado de la bolsa.
Las plataformas trading se han convertido en la nueva manera de invertir activos de muchos inversionistas, creando cierta confusión entre los interesados al comparar esto con la vieja y conocida practica de invertir en la bolsa de valores, y es que la duda es más que valida, pero para ser más específicos, cuando se realizan inversiones en acciones también se cuenta con la posibilidad de hacer trading con ellas.
Es decir, una forma parte de la otra, la primera es una categoría y la segunda es un género dentro de esa categorización. Aunque igualmente son maneras de invertir totalmente opuestas, hasta tal punto, que muchos ni siquiera consideran el trading como algún tipo de inversión, si no que en su lugar lo relacionan más con algo más cercano a jugar con tu dinero, como una especie de apuesta, un fin más arriesgado y jugando la suerte un papel trascendental en el caso.
En síntesis, podemos decir que ambas son excelentes opciones de generar ingresos, y ambas formas de inversión han generado muchos millonarios a lo largo de los años, todo es cuestión de gustos, el trading ahora mismo es una moda, la cual está viviendo su momento más promisorio, apostando por él un numero considerables de nuevos inversionistas, en su mayoría jóvenes arriesgados que crecieron a la par de este nuevo instrumento financiero.
Por su parte, la bolsa de valores en su máxima esencia sigue siendo la escogencia de un público más maduro y analítico, quienes deciden invertir su dinero en un campo con mayor seguridad y garantía financiera.
Principales riesgos del trading
1. Falta de aprendizaje; muchas personas navegan por este bursátil mundo por el simple hecho de ser una moda y querer formar parte de ella sin tener conocimientos ni formación alguna, de manera que desconocen como entrar o salir del mercado, cuales indicadores son los más seguros para apoyar sus decisiones de inversión y mucho menos en qué mercados invertir. En fin, dejando el destino de su dinero a un hecho fortuito.
2. Arriesgar más de la cuenta; cuando realizas un buena inversión y esto se traduce en un aporte importante de dinero, es habitual que te dejes llevar por la emoción del momento, siendo ese exceso de confianza un arma de doble filo llevándote a que aumentes el estado de tus posiciones y que te puedas arriesgar en demasía. La clave del trading es saber controlar las pérdidas, por lo cual, lo más recomendable en pensar con mente fría ante todo.
3. El mercado es volátil; las imágenes gráficas y los indicadores nos sirven de apoyo para prever el cambio que pueda experimentar el precio, pues el mercado es completamente imprevisible, y eso es uno de los fundamentos que hay que tener más claro, siendo uno de los principales riesgos al que hacerle frente. El análisis de los indicadores sumado a la colocación correcta de los stops, serán claves para minimizar el daño que pueda ocasionar un giro imprevisto del mercado.
4. Desconocer el mercado donde operas; previo a realizar cualquier inversión, asegúrate de empaparte bien de los pormenores del mercado. Pues algunas opciones pueden resultar atractivas, pero a la vez muy cambiantes. Permítete un tiempo para estudiar e investigar el tipo de negocio donde te sumerges.