Aprende a decorar el piso que acabas de comprar

Creo que muchos podemos llegar a coincidir en la opinión de que la compra de un piso se puede convertir en una de las experiencias más raudas que un ser humano pueda llegar a vivir alguna vez.

¿Y porque lo decimos?

Porque una vez que te han ofrecido cientos y cientos de ofertas por parte de distintos entes inmobiliarios, y sientes que ¡Por fin! diste con el que se ajusta a tus necesidades y presupuesto; inmediatamente procedes con todo el proceso de notariarlo y así poder convertirte en el flamante propietario del piso de tus sueños.

Además de eso, no olvidemos que a partir de allí se desencadenan una serie de labores que nos atañen una vez que lo hemos adquirido, como contratar un seguro de hogar evitando que algún suceso inesperado te pueda tomar desprevenido.

Otra de las labores que debemos tener presente se trata de la decoración del mismo y aquí vamos a amplificar un poco más acerca del tema.

Dile “adiós” a los muebles de antaño y que comience la limpieza

En ciertas ocasiones hay nuevos propietarios de pisos que toman la decisión de conservar los muebles que los antiguos dueños tenían en su decoración, pero esto podría convertirse en una limitante para que puedas plasmar tus ideas propias y dar rienda suelta a tu imaginación. Lo mejor que puedes hacer es deshacerte de todo lo que no sea aprovechable, para que puedas tener una visión más clara partiendo “desde la nada” y con ello poder ir dándole forma a tus ideas a la medida de tu gusto.

Para poder expresar todo este conglomerado de ideas que rondan en tu cabeza para tu piso, te sugerimos que pongas manos a la obra y comiences a limpiar. Es ideal que esto conlleve la reparación de los desperfectos que vayan apareciendo a medida que vayas limpiando; y dar la ambientación que deseas pintando las paredes con los tonos que más te gustan, acordes a la decoración que vendrá luego.

El dormitorio es una excelente opción para comenzar

Si llevas el proyecto por etapas trabajarás en orden, esto evitará que trabajes todo a la vez y que la situación se convierta en un caos. “Un paso a la vez”.

Y qué mejor opción que empezar por tu propio dormitorio, sabemos que es la parte más íntima y personal del piso y la ilusión salta a la palestra cuando nos dedicamos a decorar esta área. Es tanta la emoción durante la preparación de esta zona, que sirve para mantenernos motivados en gran manera para continuar la faena pero en un área distinta.

El acabado perfecto

Una de las cosas que persiguen quienes decoran, es que todo quede perfecto. Te sugerimos que no te desgastes buscando la perfección, ya lograste bastante eliminando el concepto anticuado al sacar la mueblería vieja, haciendo retoques y limpiando.

De seguro necesitas un seguro

Imaginemos que ya decoraste tu hogar. ¿Qué viene después? Asegurar tu inversión.

Que placer y tranquilidad se siente una vez que terminaste la decoración de tu vivienda, saber que no sólo tienes el hogar de tus sueños, sino que también resguardaste tu vivienda contra todo riesgo. Nadie está exento de cualquier incidente, y por ello es necesario tomar una decisión como esta, poniéndose en contacto con un asesor de seguros para proteger económicamente tu vivienda ante cualquier daño que pudiera sufrir tanto en su estructura como en cualquiera de los bienes que en ella moran.

Asegurar mi vivienda demuestra que la quiero

Una importante decisión en nuestras vidas es comprar una vivienda, la cual podría convertirse en la compra del piso en donde viviremos hasta los últimos años de nuestra vida.

Existen casos de familias que han tenido que pedir una hipoteca para poder costear el valor total de su vivienda; valor que en ocasiones puede llegar a ser muy elevado para el presupuesto del comprador. Es aquí donde entra en juego el seguro, el cual se encargará de estudiar cual es el valor real de la vivienda y así asegurar la inversión como contrapartida de la hipoteca en caso de ocurrir algún imprevisto.

Por ello te podemos recomendar que no sólo inviertas en la decoración de tu nuevo hogar, ten en cuenta que debes asegurarlo también.

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